2.12.07

Hay días que todo te sale bien...

Trabajar en un banco es duro. Aún así, hay días que todo te sale bien. Vas al curro, la gente se muestra colaboradora, no tienes que alzar la voz para que hagan lo que quieres, en pocos minutos consigues hacer el trabajo de todo el día... y justo cuando ya no te esperas que te salga nada mal, llega el cabronazo de turno y te bloquea el aparcamiento y tienes que pegarte ahí un rato maniobrando para poder irte a casa.