Los españoles no tenemos de qué quejarnos.

Según un estudio de consumo, la mayoría de los españoles, afirmamos no haber probado la comida rápida, vamos al gimnasio regularmente, vemos documentales, nos gusta el trabajo, nuestras relaciones sexuales son largas, hacemos el amor más que la media europea y leemos con regularidad (aparte del periódico).

Yo añadiría: no vemos pelis porno, no pirateamos música por internet y vamos a misa todos los domingos y fiestas de guardar.

Conclusión ante este estudio: Los españoles somos unos mentirosos.